Las principales carreteras del altiplano están bajo custodia policial, pero muchos de los campesinos no piensan en acatar la convocatoria.

El gobierno reforzó ayer el control de las carreteras a Oruro, Desaguadero y al lago Titicaca; Alejo Véliz dijo que él comenzará la medida de presión después del 6 de agosto

 

Quispe ratifica el bloqueo; sus bases no lo respaldan

Felipe Quispe ratificó que hoy se inicia un gradual bloqueo de caminos. Muchos de los comunarios de base no están de acuerdo con salir a las carreteras y tampoco se encuentran organizados, de acuerdo con la información recogida ayer en distintas poblaciones del altiplano lacustre. El gobierno ha reforzado el control de las principales carreteras del altiplano.

Hace una semana, para justificar el fracaso de la medida de presión, el "Mallku" dijo: "Los militares y policías nos han madrugado". Ese lunes, las carreteras amanecieron expeditas y no se vio movimiento de campesinos. Después se supo que los comunarios no estaban organizados para salir a los caminos. Un día después, un ampliado de Achacachi rechazó iniciar el corte de las rutas.

Ayer, el dirigente volvió a anunciar que hoy se inicia el bloqueo de caminos, pero de manera gradual. "Empezaremos poco a poco, porque no estamos apurados", señaló. Y aclaró que en los lugares donde estén los militares y policías, los campesinos van a "disimular" y aplicarán el "plan k'amake" (zorro).

Luego explicó que algunas provincias y comunidades están en pleno proceso de organización, y que con ese propósito va a haber asambleas en varias poblaciones de la zona. Reveló que el nuevo cuartel del movimiento campesino será fundado hoy en Huarina con el nombre de "cuartel Huari".

Los campesinos se movilizarán demandando del gobierno el cumplimiento del acuerdo de 71 puntos de Pucarani y la Isla del Sol, y en contra del ALCA, la venta del gas por Chile y el decreto 21060. Respecto a los tractores, piden la entrega de 1.000 motorizados, pero sin intereses.

Las bases no apoyan

Pese a los anuncios de Quispe, los campesinos de base no están de acuerdo con salir a las carreteras, e incluso algunos sectores dicen desconocer los motivos de la medida.

Los comunarios de Huatajata rechazan la protesta porque dicen que los tractores no les benefician debido a que tienen pequeñas parcelas. En Huarina decidieron no iniciar el bloqueo para no perjudicar la creación de una universidad en la zona. Los de Pucarani señalan que el cierre de la carretera perjudica la venta de sus quesos y que desconocen las razones de la protesta.

Los campesinos de Laja, Batallas y Achacachi no se han reunido para decidir el inicio del bloqueo. Los cantones de la provincia Omasuyos se encontrarán hoy en Achacachi para adoptar una determinación.

Desde Cochabamba, el dirigente y diputado Alejo Véliz, aliado de Quispe, anunció que las rutas de ese departamento serán bloqueadas después del 6 de agosto porque "la organización de la medida requiere de más tiempo, porque hay división en el movimiento campesino".

El parlamentario dijo que Oruro se plegará a la medida desde mañana, y Potosí y Tarija hasta el viernes. Santa Cruz dará apoyo moral porque sólo "podrá bloquear desde el 20 de agosto".

Debido a la medida de presión, también pidió la postergación del Congreso Ordinario de la COB o que la cartera de los campesinos quede acéfala.

El gobierno militariza

El viceministro de Régimen Interior, José Luis Harb, anunció ayer nuevamente, como hace una semana, que no permitirá el cierre de las carreteras y que garantizará el derecho constitucional a la libre circulación.

A partir de las cinco de la tarde de ayer, efectivos militares y policiales reforzaron a los uniformados que patrullaban las carreteras desde la semana pasada. Ellos se encuentran desplegados en las rutas a Oruro, Desaguadero y al lago Titicaca.