Mientras el especialista Henry Oporto identifica una "tolerancia" por parte del Gobierno ante el conflicto de tierras, el Movimiento sin Tierra considera una ocupación masiva si no se atiende su demanda de terrenos.
El Movimiento Sin Tierra amenazó con ocupar otras cien haciendas si es que el Gobierno no atiende cuanto antes sus demandas. Esa advertencia se presenta en medio de críticas de parte de algunos empresarios y de ex autoridades del tema tierra, en sentido de que el Ejecutivo es demasiado permisivo con la ocupación de tierras.
Según el especialista en el tema tierra, Henry Oporto, al Ejecutivo le hace falta firmeza para hacer cumplir la ley e imponer el respeto a la propiedad privada. También manifestó su preocupación ante el peligro de repercusión del problema. "Estas acciones pueden ser el detonante para que todo esto se reproduzca en otras regiones del país", aseguró Oporto.
Confirmando ese temor, ayer el dirigente del Movimiento Sin Tierra (MST), Ángel Durán, anunció que ese sector ha identificado más de 100 propiedades en todo el país que podrían ser ocupadas si no se cumple con sus demandas, que se resumen en la dotación inmediata de tierra para los campesinos que no la tienen. La falta de firmeza, según Oporto, podría ser una de las causas por las que las tomas de tierra se extienden, pero no la única. Es más, asegura que el problema es demasiado complejo para cualquier Gobierno, porque existe dificultad para distinguir entre las acciones legítimas de la gente verdaderamente necesitada y los intereses políticos y económicos de gente que instiga y encabeza estos movimientos. "Esa gente pretende pescar en río revuelto, pretende generar desestabilización política en el país, además de promocionarse políticamente", dijo.
El respecto, el ministro de Desarrollo Sostenible, Jorge Cortés, confirmó los intereses económicos que existen detrás de estas acciones. "En Cochabamba se identificaron loteadores que se aprovechan de las necesidades de la gente pobre" señaló.
El especialista agregó que el conflicto debe entenderse desde el contexto en que se desarrolla. Oporto identificó al desorden social, a la persistente pérdida de autoridad del Estado y a una situación de tránsito al vacío de poder como motivos que desencadenaron los conflictos.
Hubo un desalojo en Sacaba
Alrededor de 800 pobladores que se denominaron "Movimiento sin Techo" fueron desalojados ayer por la Policía de las tierras del ex ministro de Defensa, Carlos Sánchez Berzaín, ubicadas en la región de Ulincate en Sacaba, a 15 kilómetros de la ciudad de Cochabamba.
La operación comenzó a las 16.00 horas con la participación de alrededor 500 policías, encabezados por el viceministro de Gobierno Saúl Lara.
En primera instancia la acción se realizó sin ninguna violencia. Los uniformados obligaron a las personas, una mayoría mujeres con sus hijos, que ocuparon los predios, a subir a buses, alrededor de 22, y los trasladaron a la Policía Técnica Judicial.
Los que lograron escapar hostigaron a los uniformados con piedras y éstos respondieron utilizando gases lacrimógenos y balines. Sin embargo, no hubo heridos.
El Defensor dice que el problema es estructural
Informe o La institución sostiene que la toma de tierras es fruto de un largo proceso.
El Defensor del Pueblo presentó ayer un informe en el que sostiene que el avasallamiento de tierras tiene raíces estructurales y que no es un simple hecho coyuntural de los últimos años.
Según el informe, la toma forzosa de tierras es el resultado de un proceso en el que se conjugan muchos elementos, uno de ellos y el más importante, que el proceso de saneamiento, reversión y titulación de terrenos es lento e ineficiente, y no responde a la demanda de los campesinos.
Los datos son concluyentes en este tema. Según el Plan Nacional de Saneamiento y Titulación del Ministerio de Desarrollo Sostenible, hasta febrero de 2003, sólo 34,3 millones de hectáreas se hallaban en proceso de saneamiento, y faltan 63,7 millones de hectáreas por sanear. Es decir que todavía está pendiente ese proceso en el 60 por ciento de las tierras objeto de saneamiento.
Otro elemento que señala el informe es que, a pesar de que se supone que la Reforma Agraria eliminó el latifundio, todavía existen grandes propiedades agrícolas en manos de pocas personas. Según la los datos de la Fundación Tierra, el 58 por ciento de los terrenos con aptitud agrícola, ganadera y forestal, se encuentra en manos de 67 mil medianos y grandes propietarios, mientras que 550 mil familias campesinas cuentan con sólo el 36 por ciento de las tierras.
Por otra parte, el Defensor identificó a la falta de una política integral de reparto de tierra y desarrollo agropecuario, como otro de los elementos que desencadena en el avasallamiento. Pero este elemento tiene un añadido, que en los planes que se realizaron para resolver el problema de la tierra, no hubo consenso con los sectores afectados.
Finalmente, la institución señala que el hecho de que no funcionen las comisiones agrarias, nacional y departamentales, es otro foco de conflicto.
En visión del Defensor, todos estos elementos han provocado el surgimiento de los Sin Tierra.
Datos
Distribución o Hasta mediados de 2002, se habían ejecutado sólo dos proyectos extraordinarios de dotación de tierra a los campesinos. Uno en Marbán en el Beni, y otro en Ixiamas en La Paz.
Solicitudes o Hasta el 27 de agosto de 2002, en el INRA de Santa Cruz sólo cursaban 12 mil solicitudes de dotación de tierras, que todavía estaban en procesamiento.
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