ESTE PANORAMA SE VIVIÓ DURANTE CASI TODA LA JORNADA DE AYER EN EL CENTRO PACEÑO.
Está cercada por movilizaciones
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La ciudad de La Paz continúa cercada por los bloqueos carreteros, el paro cívico de la ciudad de El Alto y las marchas de protesta de diferentes sectores sociales se tornan más violentas, causando daños de consideración a la propiedad privada, además de poner en serio riesgo la vida de los transeúntes.
Los excesos de los manifestantes fueron más notorios, puesto que a diferencia de pasados días se registraron la rotura de parabrisas de decenas de vehículos públicos y privados, también fueron apedreadas algunas instituciones e intentaron saquear locales comerciales en las calles céntricas de la urbe paceña.
Los afectados por los hechos de violencia expresaron su protesta y repudio ante las pérdidas económicas que difícilmente serán recuperadas, porque algunos tuvieron que cancelar contratos y servicios; mientras que otras inversiones futuras quedarán frustradas .
Las manifestaciones registradas en los últimos días, lejos de ser actos de reivindicación sociales, se convirtieron en acciones de vandalismo, no respetan los derechos de los demás, es más exponen la vida de inocentes, niños que ante la explosión de cachorros de dinamitas huyen despavoridos sin rumbo. Ni siquiera respetan la labor que cumplen los periodistas por el sólo hecho de informar lo que acontece en el país.
Para tranquilidad y seguridad de la población la Policía pudo controlar la situación y evitar, a plan de gases lacrimógenos y agua, que los manifestantes ingresen al centro del poder político. Pero cuando la institución del orden empieza a detener a los vándalos, el Ministerio Público actúa con benevolencia y los libera. ¿Quién responderá por los daños ocasionados?