(ASC-Noticias/Masas).- La reestructuración de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) nuevamente fue retrasada por el presidente Evo Morales hasta marzo del próximo año, mientras que el Poder Ejecutivo y el opositor Podemos coinciden en la necesidad de ampliar el plazo para el saneamiento de tierras. La nacionalización de los hidrocarburos ha fracasado y sólo es una propaganda política que encubre el sometimiento del gobierno a las transnacionales, dijo este sábado el líder del Partido Obrero Revolucionario (POR) Guillermo Lora.
Aseguró que los gobernantes se humillan ante los Estados Unidos. "A veces Evo dice dos tonterías sobre los gobernantes de Estados Unidos, pero luego el vicepresidente Álvaro García viaja a ese país y se arrodilla buscando alguna ventaja y algún favor".
"Este proceso ha fracasado. Evo Morales no puede nacionalizar nada. Está detrás de las transnacionales y de los empresarios a los que quiere hacerles socios del Estado. Respeta la propiedad privada y dice que no nacionalizara nada", sostuvo el político.
Insistió en que la "supuesta nacionalización de los hidrocarburos" es sólo un rótulo político y propagandístico como aquel de que "este gobierno es socialista"; lo que es falso porque no puede haber socialismo con propiedad privada.
El POR pregona que la verdadera nacionalización o expropiación de los hidrocarburos, la minería, los latifundios y las empresas capitalizadas sólo será posible a través de la revolución, con el gobierno de obreros, campesinos y clases medias empobrecidas de las ciudades, es decir la dictadura proletaria.
Lora asegura que el gobierno no solucionará los agudos problemas emergentes del atraso nacional. Sostuvo que la miseria azota a la mayor parte de la población. Suficiente es ver la cantidad de gente que se va del país porque no hay empleos ni salarios mientras el gobierno repta ante el imperialismo y capital financiero.
Según el viejo líder trotskista, Bolivia ya no puede desarrollarse en el capitalismo como pretende el actual gobierno. El capitalismo está en una crisis mundial y los que están detrás de él ayudan a financiar esa crisis para que se prolongue no para que se supere.
Por estas razones, añadió, el gobierno no puede llevar a cabo una verdadera nacionalización de los hidrocarburos. "No por mala fe sino porque con su ideología está sometido a las transnacionales. Por eso hablan del capitalismo andino."
Agregó que Bolivia requiere soluciones radicales para superar su atraso económico, lo que sólo puede lograrse con un gobierno de los obreros y campesino con la dictadura del proletariado que destruirá la propiedad privada.
Refiriéndose a la Asamblea Constituyente dijo que no transformará al país y no puede ser revolucionaria. Un cambio radical sólo puede ocurrir con una revolución social que acabe con la propiedad privada. Después todo está condenado al fracaso.
Lora no descartó posibles sublevaciones populares como las de octubre 2003 y de junio 2005. "Hay protestas esporádicas, lo que constata que el Gobierno no beneficia a la gente y cuando ésta se convenza que no sirve lo expulsará como a los otros".
¿Cómo el instinto comunista se torna en conciencia política?
Muchos creen que esto puede suceder en los claustros universitarios, en los que generalmente impera la clase dominante; en los centros de investigación que crea la intelectualidad burguesa, soñando que por este camino la clase social opresora y explotadora se mantendrá indefinidamente en el poder político. Según Lora, esta impostura está cuidadosamente estructurada para difundir la idea de que la sociedad burguesa permanecerá eternamente.
Los teóricos de la clase dominante se esfuerzan por demostrar la legitimidad de la sociedad burguesa, basada en la opresión y la explotación de la mayoría de los habitantes de las clases sociales y de las nacionalidades nativas del país.
Para ellos la revolución social es una divagación absurda ideada por los "ideólogos" deschavetados, porque Dios y la intelectualidad burguesa han creado la sociedad burguesa que debe tener una existencia milenaria.
Los hechos demuestran, dice Lora, que tanto en Bolivia como en otras latitudes del planeta, vienen reptando las fuerzas de la convulsión social y que buscan sepultar al capitalismo, a fin de levantar una sociedad sin oprimidos ni explotados. Se trata del instinto comunista de los que conocen la experiencia de la propiedad privada de los medios de producción y sin saber se encaminan a efectivizar la propiedad social sobre ellos.
Resumen: en el comunismo los medios de producción serán de propiedad de todos los habitantes de la sociedad y no de ninguno de ellos en particular. De todos y de nadie.
Los gérmenes del comunismo están agigantándose en el seno de la sociedad capitalista, pugnan por sepultar el orden social burgués para reemplazarlo por un régimen de la propiedad social. Este cambio radical será efectivizado sólo por la revolución.
Este fenómeno tiene que darse en el seno de la clase obrera, que siempre comienza en no de sus sectores, con la tendencia a proyectarse hacia el conjunto de la clase. "No hablamos de llevar algunas recetas desde algunos de los instrumentos de la burguesía sino que el trueque del instinto comunista en conciencia debe ser un proceso interno, que luego se generalizará en el seno de las masas", explica Lora.
La avanzada de la clase obrera tomará en sus manos su destino cuando las masas estén radicalizadas. Así nació la Tesis de Pulacayo, que no ha tardado en penetrar al seno de las masas, desde donde se incorpora toda vez que se agudiza la lucha de clases.