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Las negociaciones EEUU-Ecuador
Marzo 29, 2006 | www.eluniverso.com


El algodón y trigo tendrán ingreso libre al Ecuador

Marzo 29, 2006

Jorge Villón enviado Especial | WASHINGTON, EE.UU.

Estados Unidos entregó anoche una respuesta a las ofertas agrícolas efectuadas por el país. Las pretensiones de EE.UU. son similares en porcentaje a las que alcanzó con Perú. El tema del arroz se negocia hoy.

Los primeros movimientos en la negociación agrícola del Tratado de Libre Comercio (TLC) comenzaron ayer. Ecuador decidió abrir su mercado al trigo y algodón estadounidenses.

Esta apertura permitirá que ambos rubros entren al mercado ecuatoriano sin pagar aranceles, un beneficio que tenían ya algunos artículos de la cadena de trigo y que se consolida con el TLC.

El ingreso libre de arancel para el trigo se otorgó a EE.UU. considerando que la producción de Ecuador es deficitaria para abastecer la demanda y que este es un producto que se importa en altos volúmenes.

José Miguel Terán, miembro del equipo negociador agrícola, señaló que para el caso del algodón hubo un acuerdo previo entre el sector productor algodonero y los compradores, "por lo que no hubo oposición" para el libre acceso de este producto.

La apertura en estas condiciones para el trigo supone que en lo posterior haya una reducción en el precio del pan, cuya materia prima es este cereal, señaló Manuel Chiriboga, jefe negociador ecuatoriano, tras hacer un primer avance de la jornada con Andrew Burst, negociador agrícola de Estados Unidos.

El responsable de la negociación nacional explicó que el trigo estaba ubicado en el sistema andino de franja de precios, un mecanismo que permitía salvaguardar los productos de la región ante la importación de bienes similares producidos fuera del área andina. Ecuador hizo excepciones a esta regla durante varios años debido a su déficit en la producción del cereal.

A más de este acuerdo, Chiriboga señaló que durante la mañana se lograron confirmar convenios previos para cerca de 80 líneas arancelarias (diferentes bienes) agrícolas ligadas a la cadena de cereales humanos como la avena, harina, cebada, malta y quinua. Algunos de estos bienes se han ubicado para que puedan ingresar sin aranceles después de cinco, diez y quince años.

Estados Unidos además entregó una respuesta a las ofertas efectuadas por el país. Las pretensiones de EE.UU. son similares en porcentaje a las que alcanzó con Perú. El equipo negociador analiza desde anoche estas respuestas.

Durante la mañana, el grupo ecuatoriano indicó que para la quinua que se produce en Ecuador se ratificó una apertura inmediata. Con esto, el producto nacional entrará sin cancelar aranceles a EE.UU.

Chiriboga afirmó además que se busca un buen acuerdo para las galletas y dulces típicos nacionales que se pueden comercializar con las comunidades ecuatorianas en el país del norte.

A pesar de este ligero avance, aún restan negociar cerca de 720 partidas o rubros del sector agrícola hasta el fin de semana. En ese paquete se incluyen los bienes más sensibles como el arroz, que se comenzará a negociar hoy. Apenas 280 tienen un acuerdo.

Flores, oleaginosas, licores y otras gamas del grupo agropecuario están por resolverse y los sectores esperan flexibilidad de EE.UU.

El de aceites y grasas también espera resultados que favorezcan a sus productores.

Los azucareros intentan asimismo en Washington ampliar su cuota de exportación.

Miguel Pérez de Fenazúcar señaló que el país tiene un excedente de 100 mil toneladas que está disponible para la exportación. "Es un producto que el Ecuador quiere exportar a EE.UU. y hemos pedido 80 mil toneladas, con un mínimo crecimiento anual de la cuota en el 5%", aseguró.

PORMENORES

MESAS

Propiedad intelectual se seguirá negociando esta semana. Los otros capítulos pendientes, como acceso a mercados, ambiente y medidas sanitarias continuaban trabajando hasta ayer. Falta cerrar seis mesas.

TAREAS

El jefe negociador de Ecuador, Manuel Chiriboga, señaló que si es factible se trabajará durante el fin de semana y se analizará extender la negociación. La ronda se inició el jueves pasado.

NO VIAJA

El ministro de Economía, Diego Borja, quien tenía previsto llegar hoy a Washington, suspendió su viaje. Ayer debía reunirse con un congresista republicano en esta ciudad.

Ganaderos pidieron 13 años de gracia hasta lograr más competitividad

DAULE, Guayas.- Alrededor de 50 ganaderos apoyaron ayer que la carne tenga beneficios dentro del TLC.

Marzo 29, 2006

Los representantes del sector ganadero que llegan hoy a Washington llevan una consigna: pedir a los negociadores ecuatorianos del TLC que los productos cárnicos se excluyan del acuerdo durante trece años.

En la asamblea que ayer mantuvo la Federación Nacional de Ganaderos del Ecuador en Daule, los dirigentes y agremiados expusieron sus preocupaciones respecto al posible ingreso de vísceras y despojos vacunos con la vigencia del TLC.

También les preocupa que la mayoría de sus socios no comprendan las palabras técnicas que utilizan los negociadores cuando tratan de explicarles en qué consiste el tratado.

La Federación de Ganaderos entregó, la semana pasada, al equipo negociador su propuesta para que se la presente a Estados Unidos.

Freddy Bustamante, presidente de la Asociación de Ganaderos del Litoral, explicó que se han solicitado trece años de gracia para los cárnicos y así tener tiempo de hacer más competitivo al sector.

En ese tiempo, dijo, se debe renegociar en la Organización Mundial de Comercio (OMC) la elevación del arancel del 10% que actualmente deben pagar los productos cárnicos que entran desde Estados Unidos. La idea es que cuando se inicie el año catorce comience la desgravación para la carne; sin embargo, el sector solicita exclusión definitiva para las vísceras y despojos (mondongos, tripas y demás).

Bustamante también comentó a los ganaderos que estuvieron ayer en la Asamblea que esos trece años deben aprovecharse para un cambio de actitud, y así producir más leche y reactivar al sector.

Indicó que anualmente en el país se producen 111 millones de libras de carne que se consumen y 80 millones de libras de despojos, lo que representa un excedente.

Los despojos y vísceras no se consumen en EE.UU. más que para elaborar embutidos, por lo que si ese país logra exportarlos con cero arancel, sería un gran perjuicio para los ganaderos nacionales, según dirigentes y agremiados.

Si los negociadores no logran hacer realidad estos pedidos, los dirigentes ganaderos advirtieron que retornarán al país inmediatamente. El gremio ya habla de una paralización a nivel nacional.

9.000 MILLONES

Esta es la cantidad de libras anuales que produce EE.UU. en vísceras y despojos. Los ganaderos piden que se proteja el mercado local.

Los arroceros se aferran a las promesas del ministro Rizzo

DAULE, Guayas.- Arroceros ecuatorianos están preocupados por el futuro que tendrán los sembríos nacionales una vez que se defina el Tratado comercial.

Marzo 29, 2006

WASHINGTON, EE.UU.

La sesión informativa del sector oficial a los empresarios se inició el lunes pasado en el salón Jefferson del hotel Washington Plaza. Eran las 19h00 cuando trece personas llegaron al sitio.

Se sentaron en un extremo de la sala a escuchar el reporte que en ese momento hacía el jefe negociador, Manuel Chiriboga. No intervinieron. Tras la culminación de la sesión ellos se levantaron y se dirigieron a buscar al ministro de Agricultura, Pablo Rizzo.

"Aquí está el sector arrocero", le dijo uno de estos al Secretario de Estado en alusión a los trece representantes de los productores de la gramínea que en ese momento se incorporaban al 'cuarto adjunto'.

La preocupación de los arroceros de cómo estaba la negociación fue inmediata. Rizzo les reiteró que se mantenían las posturas. El sector solo está dispuesto a entregar a EE.UU. un contingente de 3.000 toneladas para que esa nación venda la gramínea en Ecuador. Los dirigentes principales, entre ellos Julio Carchi, Pedro López, Manuel Andrade, mostraron la confianza de que se cumpla ese compromiso.

Cerca de las 21h00 y luego de hablar con Rizzo, los arroceros tuvieron una reunión para tomar decisiones y "unificar sus discursos" sobre las pretensiones de esta ronda.

Un dirigente de Los Ríos dijo que algunos miembros de la delegación acordaron "irse" de Washington si en el trayecto de la negociación se traspasa "la línea roja" de entregar más de las 3.000 toneladas.

Danny Figueroa, agricultor arrocero desde hace ocho años en Babahoyo, señaló que "mínimo espera que los resultados no afecten al productor ni los precios".

Las expectativas de la delegación de los productores arroceros se aferra a las promesas de Rizzo.

3.000 toneladas

es la cuota límite que Estados Unidos podrá colocar en el mercado ecuatoriano, así lo piden los arroceros.

TLC: Ecuador cede en trigo; la quinua entrará a EE.UU.

César A. Sosa. Enviado a Washington

Redacción Quito

La estrategia agrícola del TLC se planificó hasta las 23:00 del lunes pasado. El centro de operaciones, como será habitual durante esta semana, fue la habitación del jefe negociador, Manuel Chiriboga, en el octavo piso del Hotel Washington Plaza.

A las 07:30 de ayer se imprimieron los últimos documentos que se llevaron a la Oficina del Departamento Comercial de EE.UU. (USTR) donde empezó la negociación agrícola.

Chiriboga, con su equipo, tenía claros los escenarios. Ellos saben que EE.UU. responderá a la oferta que presentó Ecuador el año pasado y que puede ser similar a lo que aceptó Perú. Es decir, grandes volúmenes de importación y plazos relativamente cortos de desgravación en productos sensibles como arroz, trigo, etc.

Ayer, sin embargo, no hubo respuesta de EE.UU., la cual se espera para hoy. El equipo nacional ya tiene preparadas sus respuestas que acerquen la negociación a los intereses de Ecuador, que prevén períodos de desgravación de hasta 25 años, exclusiones para arroz, incentivos para consumir la producción local, etc.

Aunque en la negociación de ayer ya se habló de los temas sensibles del agro, se puso énfasis en los productos menos complicados, como los cereales de consumo humano. Ahí entran trigo, cebada, avena y otros. Luego se habló de aves, oleaginosas y porcinos. "Es un trabajo intenso. En broma dijimos que el grupo agrícola trabajará 20 horas al día", dijo Chiriboga.

Cuando se inicia por lo menos complicado se puede lograr acuerdos más rápido, de tal forma que los asuntos difíciles sean pocos y queden para el final. En el caso de los cereales de consumo humano, por ejemplo, hay un acuerdo con EE.UU.

La cebada para producir cerveza forma parte de este tema y un 95 por ciento de las necesidades del Ecuador se cubre con importaciones. En la malta, casi todo se importa.

En este sentido, Ecuador le ofreció a EE.UU. una apertura inmediata a estos productos, pero a cambio le pidió, no sólo la consolidación de las Preferencias Andinas (Atpdea), sino mejorar el volumen de exportación de azúcar, obtener una cuota en tabaco, llegar con derivados de cacao y azúcar, así como alcohol y bebidas.

Chiriboga confirmó que en la negociación de ayer se cerraron 80 líneas arancelarias y que hay un buen clima de negociación. "La quinua del Ecuador puede entrar con cero arancel a EE.UU., al igual que otros cereales andinos, galletas y ciertos dulces". EE.UU., por su parte, puede exportar a Ecuador, libre de aranceles, variedades de trigo y de cebada cervecera, que influirá en la reducción en el precio del pan y la cerveza, dijo Chiriboga. Hay que indicar que la importación de trigo con cero arancel rige, pero el Jefe aclaró que en varios lapsos se aplicó la franja de precios.

En los diálogos también participaron una docena de arroceros que viajaron a Washington, para asegurarse de que el TLC no afecte a su sector.

El lunes charlaron con el ministro de Agricultura, Pablo Rizzo, a quien insistieron en su pedido de que no se permita el ingreso de más de 3 000 toneladas anuales de este producto.

Rizzo dijo que así será, "aunque en una negociación hay que dar para recibir". Chiriboga añadió que consultará a los arroceros, pero "la decisión es de los negociadores y de Rizzo".

'El Presidente cierra Propiedad Intelectual'

César Augusto Sosa. Enviado

¿Hasta dónde ha avanzado la Mesa de Propiedad Intelectual?

En materia de patentes el texto está cerrado y es el mismo que aceptó Perú y Colombia. Se logró mantener el punto más complicado, referente a la materia patentable. EE.UU. quería segundos usos, patentar métodos de diagnóstico, quirúrgicos, plantas, animales, etc., eso no está en la legislación andina ni en la nacional y no se aceptó. Sin embargo, hay una cláusula que sí nos preocupa.

¿Cuál?

Donde se dice que se hará el esfuerzo razonable para patentar plantas, pero no es una obligación. Por ejemplo, el Ejecutivo puede preparar una ley con ese fin, aunque el Congreso la niegue. Así se habrá hecho el mejor esfuerzo.

El Presidente no está de acuerdo con patentar plantas...

Por eso la idea es aclarar en el texto del Acuerdo, diciendo que la protección aplica a las invenciones y no a una materia en estado natural.

¿Qué sucede si se acepta el pedido de EE.UU. de proteger datos de prueba por cinco y 10 años para fármacos y agroquímicos, respectivamente..?

El país pidió tres años para fármacos y cinco para agroquímicos. Perú y Colombia aceptaron cinco y 10.

En los anteriores TLC, EE.UU. sólo ha aceptado cinco y 10 años. ¿Por qué al país le van a dar tres y cinco años?

El Presidente quiere que se aclare el tema de la sumatoria de los plazos, para no ir más allá de los 20 y aún no tenemos una luz verde para aceptar cinco y 10 años. En la negociación hay normas en las que se gana y se pierde, y en esta perdemos.

¿Cuánto perdemos?

Según Cordes 2,6 millones de dólares anuales, que representa el uno por ciento del mercado farmacéutico. Es mínimo, pero perdemos en un sector sensible como es la salud y eso le preocupa al Presidente.

¿En esta Mesa el Presidente es quien decide?

En esa Mesa quien cierra la negociación es el Presidente. Venimos a negociar lo que fue acordado en la Presidencia y en eso estamos. Pero quien cierra la Mesa es el Presidente.

Ganaderos piden 22 años de amparo

La reunión de los ganaderos en Daule. Los productores debatieronlos escenarios de la apertura. Foto: EL COMERCIO

Redacción Guayaquil

El sector ganadero insistirá en la protección de la carne y la leche en la última ronda de negociaciones del Tratado de Libre Comercio (TLC) con los Estados Unidos.

Los representantes del gremio, Freddy Bustamante y Rodrigo Mena, viajarán hoy a Washington para pedir que todas las partidas arancelarias de los productos cárnicos tengan una desgravación de 22 años, pero con 13 años de gracia. Y para la leche, un período de gracia de al menos unos 20 años.

Además exigirán que se mantenga la cuota anual de importación de carne norteamericana. El promedio de los últimos cuatro años fue de 284 t anuales. De las cuales 182 t corresponden a vísceras y despojos comestibles.

Esas decisiones fueron analizadas ayer en Daule, durante una Asamblea en la que participaron 120 ganaderos de la Costa. Freddy Bustamante, presidente de la Federación de Ganaderos del Ecuador, señaló que el gremio no está dispuesto a ceder durante las negociaciones. "Y si Estados Unidos se muestra inflexible, dejaremos la mesa de discusión".

Bustamante explicó que Estados Unidos produce 4 000 millones de libras al año en despojos comestibles, los cuales son utilizados para la elaboración de embutidos. Mientras que en vísceras, la producción es de 5 400 millones de libras anuales, pero que no se comercializan en ese mercado.

"Si quieren vender esa producción en el país, la libra, puesta en Ecuador, costará apenas 37 centavos de dólar, y al consumidor el precio será de 50 centavos". En esas condiciones no podrán competir, asegura. Pues el costo local es de uno a 1,20 dólares.

En Ecuador, anualmente se faenan 650 mil reses al año, de las cuales se consume un promedio de 111 millones de libras de vísceras y 80 millones de libras de despojos. "El país es un alto consumidor de estos dos productos y además existe un excedente. Por eso toda la entrada de vísceras o despojos va a impactar considerablemente nuestra producción".

Agregó que mientras transcurren los años de gracia, se solicitará la renegociación de los aranceles fijados por la Organización Mundial de Comercio. Estos son el 10 por ciento para las vísceras y despojos y el 20 por ciento para los cortes finos de carne. La idea, indicó, es alcanzar el nivel de Colombia que negoció un 70 por ciento para vísceras y despojos y el 80 por ciento para cortes finos.

Una vez negociadas estas partidas, pedirán que se inicie un proceso de desgravación que rija por nueve años más. "Todo este tiempo se debe utilizar en aplicar una agenda interna, que se incluya en el presupuesto del Estado".

Los maiceros dicen que no hay consenso sobre el TLC

El Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) informó ayer que existe consenso entre los actores de la cadena del cultivo del maíz, para permitir la importación de 200 000 toneladas del grano desde EE.UU.

Según el MAG, ese acuerdo se logró el 22 de marzo entre los avicultores, industriales de alimentos balanceados y los agricultores.

Sin embargo, José Pazos, presidente del Centro Agrícola Cantonal de Ventanas, refutó tal acuerdo, porque dice que los productores no estuvieron en esa reunión. "Tampoco asistió el subsecretario de Direccionamiento Agroproductivo, Guillermo Ortega. Por eso, el acuerdo no tiene validez".

Según Pazos, ese contingente (200 000 toneladas) es 'casi atentatorio para el sector maicero'. "No es que no estamos de acuerdo con el TLC, lo que queremos saber es cómo se va a ayudar al sector".

Según los cálculos del MAG y los productores, para este invierno se sembraron 200 000 hectáreas. "El rendimiento de cada una es de tres toneladas, por lo que tendremos 600 000 toneladas, sin contar con la cosecha de verano. La industria consume hasta 750 000 toneladas. ¿Qué pasará con el contingente de EE.UU.?"

En el documento del acuerdo se establece el mejoramiento del sector, la absorción de la cosecha, garantías al precio según el Sistema Andino de Franjas de Precios, en función de la reducción arancelaria entre los países andinos y el Mercosur, entre otros puntos.

Sobre el precio del quintal de maíz, Pazos indicó que ese cálculo es bajo, pues puede costar no más de 7,60 dólares. "Nuestra propuesta de precio para este invierno es de 8,35 por quintal", dijo.


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