Sent: qua 22/1/2003 15:44
FOUR INDIGENOUS KUNA LEADERS ASSASINATED BY COLOMBIAN PARAMILITARIES ON PANAMA BORDER AND TWO US AND ONE CANADIAN REPORTERS KIDNAPPED
Translated by ASEJ/ACERCA
From La Prensa, Panama 1/21/03
http://www.prensa.com/hoy/portada/853397.html
Four Kuna indigenous authorities were assassinated this weekend and two US and one Canadian reporter were kidnapped by a Colombian paramilitary group that attacked the villages of Paya and Pucuro, in the Darien, this past weekend.
A group of 150 paramilitaries assassinated the leaders of the Kuna Paya village Ernesto Ayala, mayor; San Pascual Ayala, second mayor, and Luis Enrique Martínez, village commissioner. One of the US reporters is Robert Pelton of the Discovery Channel.
According to local witness Luis Caicedo, "We found three corpses chopped up by machetes with bullets in their head in the mountains so we couldn't take the corpses back because the land was still being guarded by the paramilitaries."
Gilberto Vasquez, mayor of Vasquez, was also murdered. His body was found with a bullet in the back of his head inside his house in the village.
This same paramilitary brigade had captured, just hours before, the US Discovery Channel reporter Robert Pelton and two other reporters, Marc Wedever of Canada, and another US journalist that is unidentified.
Migdonio Batista, a correspondent for the radio station Voices without Borders of the Darien, who resides in Paya indicated that the paramilitaries, in addition to killing the village authorities, robbed all of the belongings of the only radio station office in the village. He also said that the armed paramilitaries robbed the chickens, ducks and pigs and murdered the dogs. Upon leaving the village they dropped explosives in local trucks so that they could get away without being followed.
Another resident, Victor Maritinez, explained that since last Saturday afternoon, when they were attacked by the Colombian paramilitaries, the residents have not eaten anything and have only drank water from the river. Also, as of 48 hours after the weekends murders the National Police had not arrived with any help or protection. The "Prensa" newspaper confirmed that as of two days after the attack there was still no response from the border patrol.
Isidro Ayala, whose father was assassinated in this attack, explained that the indigenous had to confront the paramilitaries with bows and arrows and with wooden beams to defend their property and families "because there hasn't been any police in this place for two years."
Paya is a community with 530 indigenous residents located in the mountains of Pinogana and about 2 hours from the Colombian border. After the attack, there was only 50 residents remaining in Paya. The rest of the town was seeking refuge in the Boca de Cupe community or in the nearby mountains. Pucuro, a close by village, was entirely abandoned by its 20 residents. The paramilitaries arrived in Pucuro, burnt 5 houses down, and after finding no residents assassinated Gilberto Vasquez, who had been taken prisoner in Paya.
ACERCA/ASEJ received this action alert from The Kuna Youth Indigenous Movement asking for international solidarity to conndemn the violence of Plan Colombia that has contributed to this murder of indigenous leaders in Panama. We translated the artilce from http://www.prensa.com/hoy/portada/853397.html
brendanasej.org
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Ciudad de Panama, 21 de enero de 2003
La Prensa
MIEDO Y DOLOR EN PAYA, ATAQUE DEJA 4 MUERTOS
PAYA, Darién.- Cuatro autoridades indígenas(kunas) fueron asesinadas y además dos estadounidenses (entre ellos un periodista) y un canadiense fueron secuestrados por la columna de paramilitares colombianos que atacó y saqueó este fin de semana (18-19 de enero) las aldeas fronterizas de Paya y Púcuro, en Darién, confirmaron ayer residentes de estas poblaciones.
Uno de los estadounidenses es Robert Pelton, de la empresa televisiva Discovery Channel.
Según las versiones de los lugareños, un grupo de 150 integrantes de las paramilitares Autodefensas Unidas Campesinas de Urabá (ACUU) asesinaron el pasado sábado en Paya a Ernesto Ayala, jefe cacique; San Pascual Ayala, segundo cacique, y Luis Enrique Martínez, comisario de esta aldea.
"Encontramos los tres cadáveres macheteados y con disparos en la cabeza en las montañas y aún no hemos rescatado sus cuerpos porque el terreno fue minado por los 'paras'", indicó el lugareño Luis Caicedo.
De igual forma se comprobó que los paramilitares le quitaron la vida a Gilberto Vásquez, cacique principal de la población vecina de Púcuro.
Su cadáver -con un disparo en la parte de atrás de la cabeza- fue dejado dentro de su casa en esta aldea.
Esta misma brigada paramilitar había capturado horas antes a Robert Pelton, periodista estadounidense de Discovery Channel, y a dos acompañantes, Marc Wedever, canadiense, y a una estadounidense no identificada.
Migdonio Batista, un corresponsal de la emisora Voz sin Frontera del Darién, que reside en Paya, indicó que los paramilitares, además de asesinar a las autoridades de ese poblado, se robaron todos los enseres que había en el único kiosco del pueblo.
También dijo que los hombres armados se llevaron las gallinas, patos y puercos y asesinaron los perros. Al salir del pueblo enterraron explosivos en los caminos para facilitar su huida y evitar ser perseguidos.
Víctor Martínez, otro residente, explicó que desde el sábado pasado en horas de la tarde, cuando fueron atacados por los insurgentes colombianos, los moradores no comen nada y solo tienen el agua del río para ingerir y que, después de 48 horas de ocurridos los hechos, la Policía Nacional no se ha apersonado al lugar para brindarles ayuda y protección.
La Prensa pudo comprobar que en Paya, dos días después del ataque armado, no había ninguna unidad de la policía fronteriza.
Isidro Ayala, cuyo padre fue asesinado en esta incursión, manifestó que los indígenas tuvieron que enfrentarse a los paramilitares con arcos y flechas y con algunos maderos para defender sus ranchos y sus familiares "porque no hay ningún policía en este lugar desde hace dos años".
Paya es una comunidad de 530 habitantes indígenas localizada en las montañas de Pinogana y a unas dos horas a pie del límite fronterizo con Colombia.
Después del ataque, en Paya solo quedan unos 50 residentes. El resto se refugió en la comunidad de Boca de Cupe o en las montañas cercanas.
En Púcuro, la aldea entera fue abandonada por sus casi 20 residentes.
Los paramilitares, al llegar a este poblado, quemaron cinco casas porque no encontraron a nadie y luego asesinaron a su cacique Gilberto Vásquez, que había sido tomado prisionero en Paya.