Comunicado sobre la Salud de los Presos políticos

ACCION URGENTE!

Gladiz Carol Espinoza(45), graduada en Derecho Internacional, detenida en una calle de Lima el 19 de abril de 1993 junto a Fernando Salgado Martínez (26), ambos fueron conducidos a la DINCOTE y sometidos a terribles torturas que terminaron con la vida de Fernando, mientras Gladiz grave, sobrevivía a las torturas en el hospital militar, gracias a la oportuna denuncia de sus familiares ante diversas organizaciones de Derechos Humanos y al programa acción urgente le salvaron la vida. Finalmente fue trasladada a la cárcel de alta seguridad Santa Mónica de Chorrillos, dónde a consecuencia de la tortura. de los golpes violaciones, descargas eléctricas en los pezones, vagina y en la cabeza Gladiz a perdido gran parte de la visión y sufre alteraciones y lagunas mentales.

En los últimos meses fue traslada como decenas de presos a Yanamayo, donde las dificultades de la altura agravaron problemas de salud, presión, dolores de cabeza, los castigos físicos y psíquicos, las continuas amenazas de traslado a Challapalca la condujeron, la carencia absoluta de atención médica en el penal de Yanamayo sólo en forma eventual llega un sanitario que no cuenta con medicinas, ni instrumental médico, ni la suficiente preparación para atender todas las enfermedades que afectan a los internos de éste y otros penales del Perú .

Gladiz fue detenida por primera vez en marzo 1986, en ese entonces ella pudo denunciar durante el juicio y con un médico legista, las brutales torturas a las que fue sometida, para que se autoinculpe y denuncie a otros, como no lo hizo, en los 15 días de «LEY» para «investigaciones científicas» (léase torturas), el plazo fue ampliado por 15 días más. Sin derecho a un abogado, ni a la presencia de un fiscal hasta después de los 30 días. Denunció incluso violación sexual y la depravación de los policías de la DINCOTE. Después de permanecer 3 años en prisión recobro su libertad en 1989.

Como miles de presos políticos, en 1993 en un juicio sumario, totalmente ilegal, sin derecho a la defensa y frente a un tribunal militar sin rostro, fue condenada sin pruebas, sin juicio y sin derecho a la defensa a cadena perpetua. Luego de haber soportado torturas y humillaciones que la pusieron al borde de la muerte. La alimentación con un presupuesto de 0.70 de dolar, de los cuales 50% se quedan con las autoridades penitenciarias corruptas, solo alcanza para una sopa diaria por preso. Condenada a la ceguera producto de las torturas y con una secuela de enfermedades estomacales y vaginales, entro en un proceso depresivo que la esta conduciendo a la locura.

Sus familiares están preocupados, cada día los cuadros que presenta son mas agudos. Por razones humanitarias ellos piden a las organizaciones de DDHH a nivel internacional, que interpongan sus oficios para que Gladiz pueda ser atendida por médicos especializados, lo más rápido posible antes de que su caso sea totalmente irreversible, como ha ocurrido con otras presas políticas. Gladiz necesita una acción urgente por parte de la solidaridad internacional, de las organizaciones humanitarias, médicos sin fronteras y médicos mundi e Internacional a los que llamamos a visitar las cárceles del Perú para cumplir con la noble tarea de salvar vidas humanas.

Escribe por favor cartas a:

Sr. Ministro de Salud: Marino Costa Bauer

Av. Salaverry cdra.8 S/N - Jesús María

Lima- Perú

Sr. Ministro de Justicia:

Scipión Llona 350 - Miraflores - Lima

Fax. 00511- 4223577

Sr. Jorge Santisteban de Noriega

Defensoría del Pueblo

Fax. 00511-4264900

Coordinadora Nacional de DDHH

fax. 511- 4411533

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